En la entrada de hoy, tratamos dos conceptos que a priori podrían parecer reservados para las grandes empresas, pero la reputación online y offline es un concepto que en tu pyme o tú mismo como emprendedor debes tener muy en cuenta, y te cuento el porqué.
Parece cuando leo en los blogs que la Reputación (on line y off line) sólo es patrimonio de las grandes empresas. No creo que mis compañeros blogueros estén equivocados; pienso que se centran en la espectacularidad de los casos de grandes empresas y obvian la importancia que tiene la reputación para pequeñas empresas.
Realmente, los casos de estudio de este tipo de informaciones son los que provocan las grandes empresas con sus actuaciones que generan un tsunami informativo en la Red y en los medios analógicos.
En mi caso, creo que el caso de las pymes y de los emprendedores es igualmente importante. Más si cabe, porque una empresa que comienza, que lleva unos años creciendo, puede acabar su crédito si le sobreviene un caso de mala reputación como los que se publican en la blogosfera, incluso mucho más pequeño.
Un desliz en una gran empresa (incluso si es grande como el de Nestlé o el de BP) tiene solución. El valor de las acciones cae, los inversores se mosquean y la empresa debe dar la cara (puede que los responsables dimitan).
Un desliz en una pyme es demoledor. Simplemente, se hunde.
Por este motivo, es muy importante crear marca, y tener una estrategia de comunicación sólida y que permita un buen posicionamiento. Y bajo ningún concepto quiero recomendar a la pequeñas empresas que tengan temor a la comunicación, a las redes sociales, a abrirse a sus públicos.
Para ello quiero dar dos consejos que se dan para los más grandes y que son válidos para los más pequeños (aunque dimensionados a sus necesidades):
- Utiliza los canales y las herramientas de comunicación para decir lo que tus clientes pueden conseguir si se fidelizan – una experiencia de uso satisfactoria (felicidad por usar tu marca).
- Sé sincero, tremendamente sincero (y eso no quiere decir que seas locuaz e insensato a la hora de hablar). Significa que no debes mentir nunca.